El auge de las herramientas de escritura, los creadores de imágenes y la creación de vídeo basados en IA está transformando la industria creativa. A medida que estas tecnologías avanzan, se convierten en un recurso muy valioso para que los creativos produzcan contenido de mayor calidad y en menos tiempo. Sin embargo, las máquinas aún están lejos de poder sustituir por completo a los creativos y redactores humanos. Les falta el matiz y la comprensión del lenguaje necesarios para un trabajo creativo realmente eficaz. A continuación te dejamos con las reflexiones de Greg Hahn, cofundador de una de las agencias emergentes, Mischief USA.

 "El mundo no necesita otro artículo sobre la inteligencia artificial, así que he escrito uno sobre la estupidez humana.

Nunca había sido tan fácil parecer ligeramente superior al promedio. Ya se puede palpar. Nuestros feeds, mensajes de Twitter y bandejas de entrada están inundados de frases genéricas de nivel medio, creadas al instante con un simple empujón y la tecla de volver.

Esta no es una protesta contra la Inteligencia Artificial. Apenas hemos empezado a ver su potencial. Ignorarla, luchar contra ella o no intentar utilizarla sería como (ChatGPT, escribe una analogía para ilustrar la futilidad).

Los contenidos generados por la Inteligencia Artificial no tienen nada de malo. Y en estos momentos, creo que ese es el problema. Es casi demasiado perfecto. Se han eliminado todas las imperfecciones interesantes. Nos quedamos un poco más informados y sin ninguna emoción.

A medida que el mundo digital se vaya saturando de contenidos creados por computadoras, la sensación de que hay una persona al otro lado del teclado será como un rayo de sol en lo que se ha denominado el Bosque Oscuro de Internet.

Los humanos somos raros y extravagantes, y cometemos errores. Todo eso se refleja en nuestra forma de escribir. Es lo que le da vida. La jerga, los giros inesperados, la ironía, el ingenio y el disparate... son cosas que la mayoría de las veces no están presentes en los textos generados artificialmente. Estas son las cosas que llegaremos a valorar. Signos de humanidad. Como el soplo de aire fresco que sentimos cuando una persona toca el oboe en vez de un sintetizador.

La IA, concretamente ChatGPT, es el tema del momento. Y yo estoy a favor. Entra en ella, juega con ella. Vamos a ver hasta dónde llega todo esto. Pero no como un reemplazo para la humanidad.

Mi predicción para la IA es que cuanto más se normalice, más llegaremos a valorar la inteligencia humana, con todo y estupidez".